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Cada vez más organizaciones son conscientes de la importancia de gestionar eficientemente su comunicación interna, sin ella es imposible realizar funciones gerenciales como planificar, organizar y dirigir. Una comunicación abierta, transparente y dinámica facilita la toma de decisiones, aumenta la capacidad de respuesta, mejora el compromiso organizacional y desarrolla el espíritu de equipo. Es por lo que las áreas de Recursos Humanos ponemos especial énfasis en implementar políticas que mejoren la calidad de la comunicación interna.
En el artículo de hoy proponemos la herramienta de la comunicación apreciativa en el trabajo como parte de las políticas de comunicación. Es una herramienta estratégica que sirve para motivar a los trabajadores, desarrollar sus competencias, mantener un pensamiento positivo, aumentar su productividad y enriquecer sus relaciones interpersonales, de tal manera que generen un cambio significativo en la calidad de vida de los trabajadores.
Gary Chapman y Paul White señalan que todos los trabajadores tienen un lenguaje principal y se sentirán valorados y motivados si se les habla en su lenguaje. Sin embargo, si los empleados sienten que sus esfuerzos en el trabajo no son valorados, consideran la idea de dejar la organización y buscar otro empleo. Sostienen que existen cuatro lenguajes apreciativos en el trabajo:
- Palabras de afirmación
Es el uso de las palabras para expresar un mensaje positivo sobre el trabajador. No se trata solo de dar feedback sobre su desempeño en el trabajo, sino de reconocer su esfuerzo, dedicación y compromiso, evitando los mensajes genéricos como “¡Bien hecho!”, ya que es mejor referirse a un comportamiento en concreto. Los autores recomiendan evitar el exceso de elogios, ya que perderán importancia si no son percibidos como algo valioso. También deben ser percibidos como sinceros, de lo contrario el resultado podrá ser contraproducente.
- Tiempo de calidad
Es una socialización de calidad, se trata de generar conversaciones profundas, dedicar a la otra persona el íntegro de tu atención, sin distracciones, interrupciones ni realizando múltiples tareas a la vez. No se trata de “tiempo de cantidad”, ni basta con la proximidad física o monólogos unidireccionales. Los trabajadores, cuyo lenguaje del aprecio el tiempo de calidad, se sentirán más motivados cuando ven satisfecha su necesidad de pertenencia a un grupo. La empresa debe procurar generar un espacio en el que los trabajadores se sientan cómodos para comunicarse, por ejemplo, las máquinas de café fomentan el tiempo de calidad con los compañeros de trabajo, también mediante la formación de equipos de trabajo o experiencias compartidas como acudir a eventos, viajes de empresa o actividades de interés que sirven para unir y desarrollar al equipo.
- Actos de servicio
Mediante los actos de servicio los trabajadores se sienten valorados cuando les ofrecen ayuda sin tener que pedirla, para estas personas las acciones demuestran más que las palabras. El compañerismo en el lugar de trabajo, es decir, la ayuda ofrecida a los miembros del propio equipo, da como resultado organizaciones más exitosas.
- Regalos
No se trata simplemente recibir un detalle genérico, lo que motiva es que sea algo personalizado, que haya sido comprado o hecho pensando en los intereses y aficiones de la persona. Pueden ser: entradas para espectáculos deportivos, tarjetas de regalo, entradas a eventos culturales, cupones de descuentos, entre otros. Los regalos no necesariamente tienen que ser dinero u objetos, sino que pueden ser “experiencias”. Asimismo, la flexibilidad de horario también puede ser percibida como un regalo, un regalo de tiempo para dedicar a sus intereses personales.
A continuación, se presenta una infografía con algunos consejos para poner en práctica cada uno de los lenguajes apreciativos
Implementación del modelo
Hoy en día, el mundo laboral está experimentando diversas transformaciones y existe una necesidad por parte de las empresas de adecuarse constantemente a estos cambios. En un contexto como el actual, de incertidumbre e inestabilidad, resulta cada vez más evidente la necesidad de establecer políticas que ayuden a los empleados a mantener la motivación y entender los cambios como oportunidades de desarrollo y no como elementos estresores. Si bien es cierto que los gastos en el capital humano son una inversión, debido a la coyuntura económica, uno de los retos que presenta el área de Recursos Humanos es diseñar políticas que no representen un coste adicional para la empresa.
Como se verá a continuación, implementar el modelo de la comunicación apreciativa en el trabajo es relativamente sencillo y no requiere grandes costes o despliegues formativos. Únicamente será necesario contar con el apoyo de los líderes formales e informales del equipo, ya que serán ellos los que impulsen el cambio y motiven al resto del equipo a adoptar la aplicación del modelo de comunicación apreciativa. La puesta en marcha consta de tres fases: 1) preparación, 2) Formación y 3) Aplicación.
La comunicación apreciativa se puede aplicar en distintas áreas y distintos temas desde la gestión del cambio hasta la resolución de conflictos, sin embargo, queremos resaltar que no es un método único de gestión de la comunicación, sino que debe ir acompañado por otras políticas de comunicación organizacional. Además, estos conceptos pueden extenderse más allá de la organización, aplicándolo a las relaciones con los clientes y proveedores, creando mejores relaciones con ellos y afianzando la cadena de valor de la empresa.
Los resultados que han podido observarse luego de la aplicación de la comunicación apreciativa son:
- Mejora de las relaciones interpersonales: tanto entre compañeros de trabajo, como las relaciones entre empleados y jefe, incluso con clientes y proveedores.
- Mejora del clima laboral
- Aumento del compromiso organizacional.
- Aumento de la motivación
- Incremento de la productividad.
- Disminución de la rotación laboral y el absentismo.
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